Una inversión 100% líquida es aquella que puede convertirse en efectivo de forma inmediata, sin pérdida de valor ni penalizaciones. Es ideal para mantener capital disponible en caso de emergencias o cubrir necesidades financieras a corto plazo.
Accede a tu inversión en cualquier momento sin restricciones, ideal para emergencias o gastos inesperados.
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Al ser altamente líquida, evita fluctuaciones de mercado y mantiene el valor de tu inversión sin pérdidas significativas.
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